Hinchas estallan contra Gareca tras derrota

Hinchas estallan contra Gareca tras derrota

La paciencia llegó a su fin. Un grupo de fervientes hinchas chilenos, que logró ingresar al estadio Defensores del Chaco, desató toda su furia tras la derrota de la Roja ante Paraguay. El principal blanco de las críticas fue el técnico Ricardo Gareca, quien, según los testimonios recogidos por Minuto 90 en terreno, colmó la paciencia de los fanáticos.

"Gareca, ¿cuándo va a entender, compadre, que tenemos una buena selección?", se preguntaba un molesto hincha, reflejando la frustración generalizada. Las críticas apuntaron directamente al planteamiento del equipo: "Pensé que íbamos a jugar a algo más, aguantamos mucho, pensamos mucho los cambios. Creo que faltó un poquito más de ganas", expresó otro seguidor, quien sintió que "podríamos haber ganado". La demora en las sustituciones fue un clamor popular: "Los cambios los sabíamos todos menos Gareca".

La sensación de impotencia creció al considerar que "Paraguay llegó dos veces", lo que hizo aún más "amarga" la derrota. "Se debió haber ganado en el primer tiempo", lamentaban algunos, mientras otros eran más categóricos sobre el estratega: "Parece que Gareca se quiere ir rápido, no tiene ganas de hacer un equipo". Esta percepción alimenta la desesperanza de cara a la clasificación mundialista, con hinchas reconociendo que "lamentablemente se alejan cada vez más las posibilidades".

A pesar del duro golpe y las críticas, la lealtad de la parcialidad chilena se mantiene firme: "Aquí estamos los hinchas, vamos a estar en las buenas y las malas. Celebramos con las Copas América y con esta, hay que bancársela nomás, como siempre". Sin embargo, el debate sobre el futuro es ineludible. "Necesitamos un recambio, pero los que vienen en recambio no dan el ancho. Seguimos dependiendo al final de los mismos", reflexionó un fanático, mientras otro sentenciaba: "Ya esto ya murió. Confío en el siguiente proceso, para el siguiente mundial".

La paciencia llegó a su fin. Un grupo de fervientes hinchas chilenos, que logró ingresar al estadio Defensores del Chaco, desató toda su furia tras la derrota de la Roja ante Paraguay. El principal blanco de las críticas fue el técnico Ricardo Gareca, quien, según los testimonios recogidos por Minuto 90 en terreno, colmó la paciencia de los fanáticos.

"Gareca, ¿cuándo va a entender, compadre, que tenemos una buena selección?", se preguntaba un molesto hincha, reflejando la frustración generalizada. Las críticas apuntaron directamente al planteamiento del equipo: "Pensé que íbamos a jugar a algo más, aguantamos mucho, pensamos mucho los cambios. Creo que faltó un poquito más de ganas", expresó otro seguidor, quien sintió que "podríamos haber ganado". La demora en las sustituciones fue un clamor popular: "Los cambios los sabíamos todos menos Gareca".

La sensación de impotencia creció al considerar que "Paraguay llegó dos veces", lo que hizo aún más "amarga" la derrota. "Se debió haber ganado en el primer tiempo", lamentaban algunos, mientras otros eran más categóricos sobre el estratega: "Parece que Gareca se quiere ir rápido, no tiene ganas de hacer un equipo". Esta percepción alimenta la desesperanza de cara a la clasificación mundialista, con hinchas reconociendo que "lamentablemente se alejan cada vez más las posibilidades".

A pesar del duro golpe y las críticas, la lealtad de la parcialidad chilena se mantiene firme: "Aquí estamos los hinchas, vamos a estar en las buenas y las malas. Celebramos con las Copas América y con esta, hay que bancársela nomás, como siempre". Sin embargo, el debate sobre el futuro es ineludible. "Necesitamos un recambio, pero los que vienen en recambio no dan el ancho. Seguimos dependiendo al final de los mismos", reflexionó un fanático, mientras otro sentenciaba: "Ya esto ya murió. Confío en el siguiente proceso, para el siguiente mundial".

Related content

Chile pierde ante Paraguay y se encienden las alarmas

Gareca se equivoca otra vez

Por Renzo Luvecce

La Roja no levanta cabeza. En un duelo clave para medir el pulso del nuevo proceso, Chile cayó ante Paraguay y dejó más dudas que certezas. El resultado no solo golpea el ánimo del equipo, también enciende las alarmas de cara a lo que viene: el inicio de la Copa América.

Bajo la dirección de Ricardo Gareca, la selección chilena intenta reconstruirse, pero la derrota ante los guaraníes deja sensaciones preocupantes. No hubo ideas claras, el equipo lució desconectado, falto de profundidad y sin liderazgo visible en el campo.

Más allá del marcador, lo que más inquieta es la falta de identidad. Esa que en otros tiempos marcaba diferencias, hoy parece diluirse partido a partido. Gareca, un técnico reconocido por imprimir carácter y orden a sus equipos, aún no logra encontrar una fórmula que saque lo mejor de esta generación en transición.

El tiempo apremia. La Copa América está a la vuelta de la esquina, y Chile no puede permitirse llegar sin confianza ni funcionamiento. El margen de error es mínimo, y los próximos días serán clave para ajustar piezas y recuperar la convicción.

Mientras tanto, la hinchada observa con escepticismo. Porque cuando se pierde, todo se cuestiona: el sistema, los nombres, las decisiones. Pero más allá del ruido, hay una verdad que se impone: Chile necesita reaccionar. Y rápido.

Porque en este momento, más que nunca, estamos al horno.

Asumir la realidad: la frase que Chile no quiere escuchar

Un sentido de realidad

Por Grace Lazcano

Tanto nos va a costar tener un sentido de realidad. La frase golpea como un pelotazo al pecho. No viene de un comentarista extranjero, ni de un hater en redes. Viene desde dentro. De uno de los nuestros. Y por eso duele más.

Este video que ha dado vueltas por Instagram no es cualquier opinión pasajera. Es una declaración que cala hondo. Que retrata a la perfección lo que vive el fútbol chileno hoy: un momento de autoengaño. De evasión colectiva. De excusas repetidas.

No es casual que se vuelva viral. Porque habla sin rodeos del verdadero problema: Chile sigue actuando como si estuviera en la élite, cuando la realidad grita otra cosa. Fracasos en torneos juveniles, técnicos que no duran, jugadores que se pierden entre decisiones mal tomadas y un medio que sigue viviendo del pasado.

La generación dorada fue una excepción, no la regla. Y cada vez que se recuerda con nostalgia ese 2015 o 2016, se refuerza la distancia con lo que somos hoy. Porque mientras otros países invierten en fútbol formativo, infraestructura y gestión moderna, en Chile seguimos peleando por calendarios, cupos extranjeros y el VAR.

¿Tanto nos va a costar tener un sentido de realidad? Sí. Nos cuesta aceptar que ya no asustamos. Que no somos favoritos. Que hay que reconstruir desde abajo, sin promesas vacías ni nombres rimbombantes.

Pero esa aceptación puede ser también el punto de partida. Porque cuando se asume la realidad, se puede empezar a transformarla. Ya no desde la ilusión, sino desde el trabajo. Ya no desde el mito, sino desde el futuro.

El video no es solo una crítica. Es un llamado. Uno que resuena en estadios vacíos, en canchas de tierra, en conversaciones de sobremesa. Uno que incomoda, pero que necesitamos escuchar.

Porque solo así, dejando de engañarnos, podemos volver a creer en lo que algún día fuimos. Y en lo que podríamos volver a ser.