Klopp, Bielsa ¿y García? Construyendo al DT de la Roja

Klopp, Bielsa ¿y García? Construyendo al DT de la Roja

Camarín 90 estrena nueva cara y, en su renovado espacio, el conductor Matías Acuña, junto a Cristián Arcos y el invitado de la semana, Renzo Luvecce, se sumergieron en un candente debate: ¿qué características y quién debería ser el próximo director técnico de la Selección Chilena?

En este primer capítulo de la nueva temporada, cada panelista "diseñó" a su candidato ideal. Cristián Arcos no dudó en postular a Jürgen Klopp, destacando su fascinación por la capacidad del alemán para "resolver los momentos complicados" y ser "el entrenador que más da vuelta partidos".

Por su parte, Matías Acuña se inclinó por un viejo conocido: Marcelo Bielsa. "Una de las grandes cosas que tuvo Chile en la época de Bielsa fue que el equipo pesaba mucho más", argumentó Acuña, añadiendo que actualmente "estamos en una situación donde el equipo tiene que verse bien por sobre las individualidades, porque no las tenemos".

Finalmente, Renzo Luvecce, fiel a su estilo, propuso al chileno Jaime García. "Desde hace muchos años atrás que no hay un técnico chileno con la personalidad que tiene él y con la manera también de trabajar que tiene", defendió Luvecce, recordando sus pasos por Santiago Morning, La Serena y, especialmente, su exitosa campaña con Ñublense, llevándolo a Copa Libertadores y Copa Sudamericana. Luvecce enfatizó que García "trabaja mucho el físico de los jugadores, pero desde el estilo de juego" y "no transa su idea". Sin embargo, esta última característica generó discusión, ya que se planteó si su fortaleza para dirigir equipos "de chico a grande" sería suficiente para los desafíos de La Roja.

¡La discusión está abierta! Mira el capítulo completo de Camarín 90 en el canal de YouTube de Minuto 90 y forma tu propia opinión.

Camarín 90 estrena nueva cara y, en su renovado espacio, el conductor Matías Acuña, junto a Cristián Arcos y el invitado de la semana, Renzo Luvecce, se sumergieron en un candente debate: ¿qué características y quién debería ser el próximo director técnico de la Selección Chilena?

En este primer capítulo de la nueva temporada, cada panelista "diseñó" a su candidato ideal. Cristián Arcos no dudó en postular a Jürgen Klopp, destacando su fascinación por la capacidad del alemán para "resolver los momentos complicados" y ser "el entrenador que más da vuelta partidos".

Por su parte, Matías Acuña se inclinó por un viejo conocido: Marcelo Bielsa. "Una de las grandes cosas que tuvo Chile en la época de Bielsa fue que el equipo pesaba mucho más", argumentó Acuña, añadiendo que actualmente "estamos en una situación donde el equipo tiene que verse bien por sobre las individualidades, porque no las tenemos".

Finalmente, Renzo Luvecce, fiel a su estilo, propuso al chileno Jaime García. "Desde hace muchos años atrás que no hay un técnico chileno con la personalidad que tiene él y con la manera también de trabajar que tiene", defendió Luvecce, recordando sus pasos por Santiago Morning, La Serena y, especialmente, su exitosa campaña con Ñublense, llevándolo a Copa Libertadores y Copa Sudamericana. Luvecce enfatizó que García "trabaja mucho el físico de los jugadores, pero desde el estilo de juego" y "no transa su idea". Sin embargo, esta última característica generó discusión, ya que se planteó si su fortaleza para dirigir equipos "de chico a grande" sería suficiente para los desafíos de La Roja.

¡La discusión está abierta! Mira el capítulo completo de Camarín 90 en el canal de YouTube de Minuto 90 y forma tu propia opinión.

Recomendado

Bicampeones de América: ¿con cuántos de ellos te gustaría jugar?

Al mirar hacia atrás, es inevitable sentir que fuimos testigos de algo irrepetible. La generación dorada del fútbol chileno no solo rompió récords. Nos regaló identidad, carácter y una forma única de competir. Hoy, varios de esos nombres ya no están en las nóminas, pero siguen presentes en la memoria colectiva de los hinchas. Y ante la pregunta que nos plantea Pelotazo: “¿Con cuántos de esos bicampeones de América te gustaría jugar?”, la respuesta tiene más emoción que táctica.

Porque no se trata solo de talento. Se trata de mística. De temperamento. De entender el peso de la camiseta. Y esa camada, la que conquistó las Copas América de 2015 y 2016, lo entendió todo.

Claudio Bravo, con su liderazgo sereno y atajadas imposibles, fue el muro que sostuvo más de una hazaña. Gary Medel, símbolo de garra y entrega, jugaba como si cada partido fuera el último. Arturo Vidal, pura potencia, carácter y despliegue. Charles Aránguiz, el silencioso que hacía jugar a todos. Alexis Sánchez, incansable, impredecible, desequilibrante. Y Eduardo Vargas, el que convirtió goles como si fuera lo más simple del mundo.

¿Con cuántos de ellos te gustaría compartir cancha? ¿A quién dejarías afuera? Preguntas imposibles. Porque fueron un equipo de verdad. Se potenciaban entre sí. Se cubrían las espaldas. Se peleaban y se abrazaban con la misma intensidad.

Hoy, que el fútbol chileno busca reconstruirse, la nostalgia por esos bicampeones se vuelve aún más poderosa. No porque vivamos del pasado, sino porque aún no aparece una generación que nos haga olvidar aquella. Y eso habla de lo grande que fueron.

El legado de los bicampeones no está solo en los títulos. Está en la forma en que nos hicieron sentir. En cómo se enfrentaban sin miedo a gigantes. En cómo hicieron que millones creyeran que sí era posible.

¿Con cuántos de ellos jugarías? Tal vez con todos. Porque juntos, escribieron la página más gloriosa del fútbol chileno.

"Podridos": el malestar del hincha tras el empate con Ecuador

Podrido. Esa es la palabra que, con crudeza, mejor resume el sentir de miles de hinchas en Chile, según Pelotazo.

El público de la Selección Chilena en el Estadio Nacional, tantas veces criticado por su tibieza, ahora se hizo sentir. Los nuevamente tardíos cambios de Ricardo Gareca estaban a la vista de todos los presentes en Ñuñoa, menos para el Tigre.

Y cuando finalmente los hizo, parecía que el resultado, un amargo empate sin goles que nos sigue alejando del Mundial 2026, ya estaba sellado.