Chamagol y sus goles más icónicos con el Cacique

Chamagol y sus goles más icónicos con el Cacique

En la antesala de lo que será el centenario de Colo Colo, el exdelantero Sebastián "Chamagol" González fue el invitado estelar en una nueva edición de Reino Fútbol, el programa de Minuto 90 conducido por Cristián Arcos. En una distendida conversación, el recordado artillero desempolvó el baúl de los recuerdos para rememorar tres de sus anotaciones más emblemáticas vistiendo la camiseta del Cacique.

Un Golazo Inesperado en San Felipe

Uno de los primeros tantos que vino a la memoria de "Chamagol" fue uno de antología frente a Unión San Felipe. "Viene un despeje de Gamboa y con la personalidad que me caracterizaba en esos momentos, no lo dudé, le pego de lleno y la pelota toma una curva y golazo, golazo", relató el exjugador. La anécdota no terminó ahí, ya que años después se encontró con el hijo del portero afectado: "Oye, no, yo soy el hijo del arquero que le hiciste el gol en San Felipe. Hoy, hasta el día de hoy le hacemos bullying a mi papá con el gol de casi mitad de cancha", le confesó.

La Palomita Histórica: Centro Sin Zapato de Barticciotto

Otro gol que quedó grabado en la retina de los hinchas y del propio González fue el que convirtió tras una insólita asistencia de Marcelo Barticciotto, quien ¡centró sin un zapato! "Yo lo único que me acuerdo es que vi que Barty seguía corriendo. Yo cuando ya veo que viene el centro de Barty, que fue perfecto además, me tiro una palomita y termina siendo un gol", explicó Sebastián. Con una sonrisa, añadió: "Creo que no sé si hay mucho gol en el mundo de un centro sin zapato. Además con la perfección del centro".

Emoción Pura: El Gol a Palmeiras y el Recuerdo Familiar

Finalmente, "Chamagol" destacó un gol trascendental ante Palmeiras por Copa Libertadores, un tanto que tuvo un fuerte componente emocional y familiar. Cristián Arcos le recordó: "Te vincula de una u otra manera con tu tío, porque tu tío había ganado jugando por Colo Colo en Río". González profundizó en la significancia del gol: "Colo Colo no había ganado muchas veces a equipos brasileños en Copa Libertadores, y una de esas había sido con un gol de mi tío. Más allá de lo que genera ese gol, porque yo siempre me caractericé por las celebraciones, créeme que cuando voy corriendo no sabía qué hacer. Fue demasiado potente".

Este gol tuvo un significado aún más profundo y personal: "Fue prácticamente el último gol o alegría quizás que tuvo mi tío Chamaco, porque después a los meses mi tío fallece. Unos amigos de mi tío que estaban en la casa viendo el partido con él, le sacaron una foto y en su expresión...", confidenció el exdelantero, revelando la íntima conexión familiar con esa conquista.

Para revivir la conversación completa y conocer más anécdotas de Sebastián "Chamagol" González, puedes ver el capítulo completo de Reino Fútbol en el canal de YouTube de @minuto90cl y también en las pantallas de @zapping_sports.

Y tú, ¿cuáles son los goles de "Chamagol" con Colo Colo que más recuerdas?

En la antesala de lo que será el centenario de Colo Colo, el exdelantero Sebastián "Chamagol" González fue el invitado estelar en una nueva edición de Reino Fútbol, el programa de Minuto 90 conducido por Cristián Arcos. En una distendida conversación, el recordado artillero desempolvó el baúl de los recuerdos para rememorar tres de sus anotaciones más emblemáticas vistiendo la camiseta del Cacique.

Un Golazo Inesperado en San Felipe

Uno de los primeros tantos que vino a la memoria de "Chamagol" fue uno de antología frente a Unión San Felipe. "Viene un despeje de Gamboa y con la personalidad que me caracterizaba en esos momentos, no lo dudé, le pego de lleno y la pelota toma una curva y golazo, golazo", relató el exjugador. La anécdota no terminó ahí, ya que años después se encontró con el hijo del portero afectado: "Oye, no, yo soy el hijo del arquero que le hiciste el gol en San Felipe. Hoy, hasta el día de hoy le hacemos bullying a mi papá con el gol de casi mitad de cancha", le confesó.

La Palomita Histórica: Centro Sin Zapato de Barticciotto

Otro gol que quedó grabado en la retina de los hinchas y del propio González fue el que convirtió tras una insólita asistencia de Marcelo Barticciotto, quien ¡centró sin un zapato! "Yo lo único que me acuerdo es que vi que Barty seguía corriendo. Yo cuando ya veo que viene el centro de Barty, que fue perfecto además, me tiro una palomita y termina siendo un gol", explicó Sebastián. Con una sonrisa, añadió: "Creo que no sé si hay mucho gol en el mundo de un centro sin zapato. Además con la perfección del centro".

Emoción Pura: El Gol a Palmeiras y el Recuerdo Familiar

Finalmente, "Chamagol" destacó un gol trascendental ante Palmeiras por Copa Libertadores, un tanto que tuvo un fuerte componente emocional y familiar. Cristián Arcos le recordó: "Te vincula de una u otra manera con tu tío, porque tu tío había ganado jugando por Colo Colo en Río". González profundizó en la significancia del gol: "Colo Colo no había ganado muchas veces a equipos brasileños en Copa Libertadores, y una de esas había sido con un gol de mi tío. Más allá de lo que genera ese gol, porque yo siempre me caractericé por las celebraciones, créeme que cuando voy corriendo no sabía qué hacer. Fue demasiado potente".

Este gol tuvo un significado aún más profundo y personal: "Fue prácticamente el último gol o alegría quizás que tuvo mi tío Chamaco, porque después a los meses mi tío fallece. Unos amigos de mi tío que estaban en la casa viendo el partido con él, le sacaron una foto y en su expresión...", confidenció el exdelantero, revelando la íntima conexión familiar con esa conquista.

Para revivir la conversación completa y conocer más anécdotas de Sebastián "Chamagol" González, puedes ver el capítulo completo de Reino Fútbol en el canal de YouTube de @minuto90cl y también en las pantallas de @zapping_sports.

Y tú, ¿cuáles son los goles de "Chamagol" con Colo Colo que más recuerdas?

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Beausejour y la revancha personal que se celebra en silencio

Hay momentos en la carrera de un futbolista que no aparecen en los titulares, pero que lo cambian todo. Jean Beausejour vivió uno de esos instantes cuando, en plena concentración con la Selección Chilena, se enteró de que finalmente iba a ser titular. No era un partido cualquiera, no era una alineación más. Era la confirmación de que el trabajo, muchas veces silencioso y fuera de foco, finalmente había rendido frutos.

“Yo le había dicho a un par de compañeros que iba a jugar”, confesó tiempo después. Pero su reacción no fue de euforia ni de alegría desbordada. Fue de determinación. “No me vengan a abrazar ahora”, soltó. Porque Beausejour sabía que el fútbol está lleno de momentos en que se aplaude tarde, cuando la convicción ya viene de antes.

El lateral izquierdo, símbolo de la Generación Dorada, siempre tuvo una relación especial con la Roja. Con dos Mundiales encima, títulos con la camiseta de Chile y una carrera forjada con esfuerzo, su recorrido ha sido más de constancia que de flashes. Y en ese partido, cuando todos esperaban a otro, él demostró que todavía estaba para competir al más alto nivel.

Ese “no me vengan a abrazar ahora” no fue un desprecio. Fue una sentencia. Un mensaje para quienes dudan, para quienes aplauden solo cuando el éxito ya es evidente. Porque Beausejour nunca necesitó aprobación externa para rendir. Su motivación venía de adentro, de ese fuego que arde en los verdaderos profesionales.

En tiempos donde las carreras se construyen a golpe de viralizaciones y marketing, Beausejour nos recuerda que el fútbol sigue premiando a los que no bajan los brazos. A los que se preparan cuando nadie los ve. A los que hablan menos y corren más.

Y en silencio, como tantas veces, volvió a ganarse el respeto de todos.

Bilardo: la mente maestra que cambió la historia del fútbol argentino

Carlos Salvador Bilardo no fue simplemente un entrenador. Fue una mente brillante, un estratega que entendió el fútbol como pocos y que marcó a fuego a generaciones de jugadores y entrenadores. Su legado trasciende títulos: vive en la forma de jugar, de pensar y de sentir este deporte.

En 1986, llevó a la selección argentina a lo más alto del planeta. Su sociedad con Diego Maradona es una de las más legendarias del fútbol mundial. Pero más allá del campeonato, lo que dejó fue una manera de entender el juego: obsesiva, táctica, inteligente. Con Bilardo, nada quedaba al azar. Cada detalle contaba, cada movimiento tenía un porqué.

Sus métodos fueron cuestionados por muchos y celebrados por otros tantos. No era un técnico convencional. Podía hablar de alineaciones en una boda o cambiar un esquema en plena madrugada. Vivía para el fútbol, y el fútbol vivía en él. Desde el Estudiantes campeón de América en los años 60 hasta su obra maestra en México 86, su sello fue inconfundible.

Lo llamaban “el Doctor”, no solo por su título en medicina, sino por la precisión quirúrgica con la que diseccionaba los partidos. Cada jugada tenía detrás horas de estudio, cada resultado era producto de un plan meticulosamente ejecutado.

En tiempos donde el espectáculo muchas veces se impone a la táctica, recordar a Bilardo es volver a las raíces de un fútbol pensado, estudiado y apasionado. Su influencia sigue presente en nombres como Diego Simeone, Néstor Pekerman y tantos otros que bebieron de su sabiduría.

Carlos Salvador Bilardo no solo ganó una Copa del Mundo. Ganó el respeto eterno de quienes entienden que, en el fútbol, la cabeza es tan importante como los pies.