Peluca Falcón desata locura alba en Miami

Peluca Falcón desata locura alba en Miami

Un video que rápidamente se ha vuelto viral en redes sociales muestra la euforia de Maximiliano Falcón, defensor de Colo-Colo, celebrando un gol del Cacique. El registro, compartido originalmente por el usuario de TikTok @colocolito91, captura al "Peluca" festejando con gran entusiasmo junto a los miembros de @mialbos, la agrupación de hinchas colocolinos en Miami.

El defensa uruguayo, conocido por su entrega en la cancha, no ocultó su alegría y se unió a la celebración de los fanáticos en el extranjero, demostrando que la pasión por Colo-Colo no conoce fronteras.

La difusión del video también incluyó una pregunta directa a la fanaticada alba: "¿PERDONAN AL PELUCA, AMIGOS ALBOS?", generando diversas reacciones y comentarios entre los seguidores del Popular.

Un video que rápidamente se ha vuelto viral en redes sociales muestra la euforia de Maximiliano Falcón, defensor de Colo-Colo, celebrando un gol del Cacique. El registro, compartido originalmente por el usuario de TikTok @colocolito91, captura al "Peluca" festejando con gran entusiasmo junto a los miembros de @mialbos, la agrupación de hinchas colocolinos en Miami.

El defensa uruguayo, conocido por su entrega en la cancha, no ocultó su alegría y se unió a la celebración de los fanáticos en el extranjero, demostrando que la pasión por Colo-Colo no conoce fronteras.

La difusión del video también incluyó una pregunta directa a la fanaticada alba: "¿PERDONAN AL PELUCA, AMIGOS ALBOS?", generando diversas reacciones y comentarios entre los seguidores del Popular.

Related content

Un córner con altura de miras

En el fútbol, los detalles marcan la diferencia. Que lo diga sino el ejecutante de este particular córner, que debió aprovechar las bondades del terreno de juego.

El verdadero 'quién pudiera': el legado de un distinto

Hay jugadores que, incluso después del retiro, siguen generando admiración. No por nostalgia vacía, sino porque dejaron huella. Porque hicieron del fútbol algo más que correr detrás de una pelota. Porque jugaron con clase, con inteligencia, con elegancia. De esos hay pocos. Y uno de ellos es quien inspira este "quién pudiera": Thierry Henry.

Es cosa de ver la reacción de Cecilio Waterman con el "Mimo" cuando anota por Panamá ante Estados Unidos. Es la reacción al ver a un ídolo.

Se retiró hace poco, pero su nombre todavía aparece en conversaciones de pasillo, en análisis tácticos, en recuerdos de hinchas que valoran lo sutil, lo fino, lo inteligente. Su forma de jugar hablaba por sí sola: lectura del juego impecable, pases quirúrgicos, personalidad serena pero influyente.

No se trata solo de un exjugador. Se trata de una forma de entender el fútbol. De una generación que creció viéndolo como ejemplo, dentro y fuera del campo. Porque no solo marcaba diferencias con la pelota, también con su manera de convivir con el grupo, con su humildad, con su profesionalismo.

Y ahí está lo bonito de esta historia: que incluso después del último partido, sigue inspirando. Porque algunos nacen para jugar al fútbol, y otros nacen para hacerlo mejor.

El verdadero "quién pudiera" no es envidia. Es respeto. Es admiración. Es legado.