Menos chimuchina, más acción: el mensaje de Beausejour

Menos chimuchina, más acción: el mensaje de Beausejour

En momentos en que el fútbol chileno vive una de sus etapas más confusas, con críticas que llegan desde todos los frentes y con resultados que no acompañan, hay voces que prefieren ir directo al grano. Y una de ellas fue la de Jean Beausejour, quien sin pelos en la lengua lanzó un mensaje que resume lo que muchos piensan: menos chimuchina, más acción.

El exseleccionado nacional, referente de la Generación Dorada y actual comentarista, no se quedó en lugares comunes ni frases decorativas. Su diagnóstico fue claro: la Selección Chilena necesita cambios profundos, y los necesita ya. No basta con declaraciones optimistas ni con diagnósticos repetidos. Se necesita valentía. Se necesita hacer ajustes reales en nombres, esquemas y mentalidades.

La crítica apunta a un problema estructural: se ha hablado demasiado, se ha polemizado hasta el cansancio, pero el rendimiento en cancha no ha mejorado. Y eso, a juicio de muchos, solo se revierte con decisiones difíciles. Dejar de pensar en el pasado glorioso y enfrentar el presente con la crudeza que merece.

El mensaje cala hondo porque viene de alguien que lo vivió desde dentro. Beausejour no habla desde la tribuna, habla desde la experiencia. Desde los vestuarios donde se ganaron Copas América. Desde las derrotas que dolieron y las victorias que unieron a todo un país. Por eso sus palabras tienen peso.

El público también lo siente. La hinchada está cansada de excusas, de discursos vacíos. Quiere ver respuestas en la cancha. Quiere volver a creer.

Y para eso, tal como dijo Bose, hay que cortar con la chimuchina. Es tiempo de mirar al frente, tomar decisiones valientes y volver a construir desde el juego.

Porque si algo le falta hoy a la Roja, no es pasión. Es claridad. Y mucha, mucha acción.

En momentos en que el fútbol chileno vive una de sus etapas más confusas, con críticas que llegan desde todos los frentes y con resultados que no acompañan, hay voces que prefieren ir directo al grano. Y una de ellas fue la de Jean Beausejour, quien sin pelos en la lengua lanzó un mensaje que resume lo que muchos piensan: menos chimuchina, más acción.

El exseleccionado nacional, referente de la Generación Dorada y actual comentarista, no se quedó en lugares comunes ni frases decorativas. Su diagnóstico fue claro: la Selección Chilena necesita cambios profundos, y los necesita ya. No basta con declaraciones optimistas ni con diagnósticos repetidos. Se necesita valentía. Se necesita hacer ajustes reales en nombres, esquemas y mentalidades.

La crítica apunta a un problema estructural: se ha hablado demasiado, se ha polemizado hasta el cansancio, pero el rendimiento en cancha no ha mejorado. Y eso, a juicio de muchos, solo se revierte con decisiones difíciles. Dejar de pensar en el pasado glorioso y enfrentar el presente con la crudeza que merece.

El mensaje cala hondo porque viene de alguien que lo vivió desde dentro. Beausejour no habla desde la tribuna, habla desde la experiencia. Desde los vestuarios donde se ganaron Copas América. Desde las derrotas que dolieron y las victorias que unieron a todo un país. Por eso sus palabras tienen peso.

El público también lo siente. La hinchada está cansada de excusas, de discursos vacíos. Quiere ver respuestas en la cancha. Quiere volver a creer.

Y para eso, tal como dijo Bose, hay que cortar con la chimuchina. Es tiempo de mirar al frente, tomar decisiones valientes y volver a construir desde el juego.

Porque si algo le falta hoy a la Roja, no es pasión. Es claridad. Y mucha, mucha acción.

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Fútbol y Orgullo: El crimen de María Pía Castro

En el marco del Día del Orgullo, el fútbol chileno tiene una historia que no se puede olvidar. Se trata de una que mezcla la pasión por el deporte con la memoria y la resistencia: la historia de María Pía Castro, destacada futbolista del club Municipal de Limache, en la Quinta Región.

María Pía era una talentosa número 10, zurda y habilidosa, hincha apasionada de Colo-Colo y cuyo referente era Matías Fernández. Con su club, ganó tres copas y fue parte fundamental del equipo bicampeón. Su gran sueño era llegar a vestir la camiseta de la selección chilena. Sin embargo, en 2008, su carrera y su vida fueron interrumpidas de la forma más violenta.

La futbolista, que era lesbiana visible, fue encontrada calcinada en un sitio eriazo de Limache. La autopsia posterior evidenció que había recibido golpes en el cráneo. A pesar de las pruebas, la fiscalía cerró el caso sin encontrar culpables, y a día de hoy, su crimen sigue impune. En el camarín, su orientación nunca fue motivo de exclusión, pero fuera de la cancha, en una zona rural, sufrió un odio que terminó costándole la vida.

Durante su funeral, más de 600 personas la despidieron en el Estadio Gustavo Carvacho, donde sus compañeras de Municipal de Limache gritaron su nombre por última vez y le dedicaron un gol simbólico. Porque el fútbol también es memoria y resistencia. Hoy, los sueños inconclusos de María Pía Castro reviven en cada jugadora que entra a la cancha sin esconder quién es, con una respuesta que persiste: seguir jugando con orgullo.

¿A dónde se va la plata de Huachipato?

En una nueva columna para Minuto 90, Cristián Arcos desmenuza la increíble y polémica situación que afecta a Huachipato. Una figura contractual que, si bien es legal, ha generado indignación: durante los próximos años, cualquier ingreso por la venta de jugadores del club no irá a las arcas de la institución, sino que a sus antiguos controladores.

Arcos explica el origen de esta situación. Cuando el grupo liderado por Marcelo Rosenblut adquirió el club, lo hizo mediante dos fórmulas: un crédito externo y un valor adicional que se pagaría con las futuras transferencias de futbolistas. Quienes controlan el cobro de este monto son, precisamente, los excontroladores del equipo siderúrgico, Victoriano Cerda y Marcelo Pesce.

Esto significa que hasta el año 2029, o hasta que se cubra la cuota acordada, el dinero de las ventas de jugadores irá directamente a Cerda y Pesce. Un ejemplo concreto es el de Walter Mazzantti, por quien Huachipato recibió parte de los 3.5 millones de dólares de su traspaso desde Huracán a Independiente, dinero que en su mayoría fue a los exdueños. Lo mismo ocurrirá con eventuales traspasos de figuras como Felipe Loyola o Javier Altamirano.

Aunque el mecanismo está totalmente normado y no es ilegal, Arcos lo describe como una de las "grietas que tiene este sistema de controladores" en el fútbol chileno. Una "aberrante figura" que, al estar amparada por el marco legal, podría replicarse en cualquier otro club del país.