Debate al rojo: ¿Para quién juega la FIFA?

Debate al rojo: ¿Para quién juega la FIFA?

En un nuevo capítulo del programa Camarín 90, se encendió un intenso debate sobre el rol de la FIFA frente a las complejidades políticas de los países anfitriones de sus torneos, apuntando directamente a la próxima Copa del Mundo que se realizará en Estados Unidos y al venidero Mundial de Clubes.

La discusión partió de una premisa contundente: "Qatar es un Mundial que no se debió jugar en Qatar. A la FIFA no le importa nada". Esta crítica sirvió como punto de partida para analizar el inminente conflicto que se avecina con el Mundial en Norteamérica, donde existen vetos de entrada para 36 nacionalidades. El problema es claro: Irán, una de las selecciones afectadas por estas restricciones, ya está clasificada al torneo, al igual que otros países como Uzbekistán y Jordania que podrían estar en la misma situación.

Durante el programa se argumentó que la FIFA adopta una postura "oficialista", mostrándose indiferente ante el sistema político del país organizador, ya sea "una monarquía, una dictadura o una democracia". Esta "falsa neutralidad", según se señaló en el debate, termina favoreciendo a gobernantes que utilizan el deporte para mejorar su imagen o preparar campañas de reelección. Como ejemplo, se recordó que Gianni Infantino fue el único dirigente deportivo que asistió a la investidura de Donald Trump, dejando en evidencia para quién juega realmente el máximo organismo del fútbol.

Te invitamos a comentar y a revisar el análisis completo de esta polémica en el nuevo capítulo de Camarín 90, ya disponible en nuestro canal de YouTube y en las pantallas de Zapping Sports.

En un nuevo capítulo del programa Camarín 90, se encendió un intenso debate sobre el rol de la FIFA frente a las complejidades políticas de los países anfitriones de sus torneos, apuntando directamente a la próxima Copa del Mundo que se realizará en Estados Unidos y al venidero Mundial de Clubes.

La discusión partió de una premisa contundente: "Qatar es un Mundial que no se debió jugar en Qatar. A la FIFA no le importa nada". Esta crítica sirvió como punto de partida para analizar el inminente conflicto que se avecina con el Mundial en Norteamérica, donde existen vetos de entrada para 36 nacionalidades. El problema es claro: Irán, una de las selecciones afectadas por estas restricciones, ya está clasificada al torneo, al igual que otros países como Uzbekistán y Jordania que podrían estar en la misma situación.

Durante el programa se argumentó que la FIFA adopta una postura "oficialista", mostrándose indiferente ante el sistema político del país organizador, ya sea "una monarquía, una dictadura o una democracia". Esta "falsa neutralidad", según se señaló en el debate, termina favoreciendo a gobernantes que utilizan el deporte para mejorar su imagen o preparar campañas de reelección. Como ejemplo, se recordó que Gianni Infantino fue el único dirigente deportivo que asistió a la investidura de Donald Trump, dejando en evidencia para quién juega realmente el máximo organismo del fútbol.

Te invitamos a comentar y a revisar el análisis completo de esta polémica en el nuevo capítulo de Camarín 90, ya disponible en nuestro canal de YouTube y en las pantallas de Zapping Sports.

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Final de Champions: DTs y sus batallas

Hoy, el fútbol europeo corona a su rey con la esperada final de la Champions League entre el PSG francés y el Inter de Milán italiano. Pero más allá de las estrellas en el campo y las estrategias, Renzo Luvecce nos invita en su columna a profundizar en las poderosas historias humanas de los dos hombres que dirigirán desde la banca: Luis Enrique y Simone Inzaghi.

Por un lado, Luis Enrique, el estratega del PSG, lleva consigo una historia de profunda resiliencia. Como recuerda Luvecce, el técnico español vivió la dolorosa pérdida de su hija Xana en 2019, a causa de un cáncer óseo. Ella pudo ver a su padre levantar la "Orejona" en 2015, cuando dirigía al Barcelona que venció a la Juventus. Hoy, Luis Enrique siente que su hija lo acompaña desde el cielo, una presencia constante en su lucha por alcanzar nuevamente la gloria europea.

En la otra vereda se encuentra Simone Inzaghi, el hombre que le devolvió el respeto continental al Inter de Milán, llevándolo a su segunda final de Champions consecutiva tras caer en 2023 ante el Manchester City. Hermano menor del exitoso exdelantero Filippo Inzaghi, Simone forjó su propio camino. Tras una carrera como jugador más discreta, donde igualmente conoció la gloria con la Lazio, ha brillado con luz propia como entrenador, superando incluso los logros de su hermano en esta faceta.

Ante estas dos conmovedoras trayectorias, Luvecce plantea la interrogante: ¿Quién merece más alzar el trofeo? ¿El técnico que, pese a una pérdida irreparable, sigue luchando, o el entrenador que, desde un segundo plano familiar, ha construido una carrera formidable? La decisión se juega en la cancha, pero sus historias ya los hacen gigantes.

Chile ganó la Copa América a pesar de Jadue

A pocas semanas de que se cumplan 10 años del histórico título de la Copa América 2015, ha resurgido con fuerza el debate sobre el rol de Sergio Jadue. En su columna para Minuto 90, Cristián Arcos aborda la narrativa que intenta posicionar al controvertido exdirigente como una pieza clave del éxito, una idea que desde Minuto 90 se rechaza enfáticamente: no todo es lícito para alcanzar la gloria.

Arcos es tajante al afirmar que "Chile fue campeón de América no por Sergio Jadue, fue campeón pese a Sergio Jadue". Nuestro editor, secundado por Matías Acuña y Grace Lazcano, califica como una "verdadera fantasía" la idea de que La Roja obtuvo su primer título continental gracias a la gestión del ex timonel de la ANFP. "Es avalar de pronto la posibilidad de la presencia y la importancia de un dirigente que va a ser condenado por corrupción, que ha reconocido la corrupción. Es como decir 'da lo mismo lo que hizo, total nos sacó campeón'. Y ese, claramente no es el camino", sentencia Arcos, criticando la noción de que "para ser campeones todo valía".

El análisis subraya que esta visión ignora por completo los sólidos argumentos futbolísticos que Chile ostentaba. "El equipo tenía argumentos de sobra para salir campeón en el 2015", se recalca, mencionando a figuras como Claudio Bravo, entonces arquero del Barcelona; Arturo Vidal, brillando en la Juventus y luego en el Bayern Múnich; y Alexis Sánchez, figura en el Arsenal. Todo esto, sumado a "una gran dirección técnica a cargo de Jorge Sampaoli". Con estos elementos, el equipo era competitivo y lo demostró "ganándole a la Argentina finalista del mundo con el mejor jugador del mundo en sus filas".

Finalmente, se recuerda que Chile ha tenido procesos dirigenciales serios con éxitos previos, como el de Carlos Dittborn, que consiguió la sede del Mundial de 1962 donde La Roja fue tercera, o la gestión de Ricardo Abumohor en 1993, que devolvió a Chile a un Mundial después de 16 años bajo la dirección de Nelson Acosta. La conclusión es clara: "Chile sale campeón de América no por Sergio Jadue, sale campeón pese a Sergio Jadue".