En conferencia de prensa, el director técnico de Universidad de Chile, Gustavo Álvarez, abordó por primera vez los complicados momentos vividos en Avellaneda, Argentina. El estratega relató la dramática experiencia que enfrentó su hijo de tan solo 9 años en el estadio durante los incidentes en el partido con Independiente por Copa Sudamericana.
Más allá del mal rato, Álvarez tuvo un notable gesto de gratitud que trasciende la rivalidad deportiva. El entrenador agradeció públicamente las palabras de apoyo de dos referentes del archirrival, Colo Colo: Arturo Vidal y Esteban Pavez, valorando su empatía en medio de la difícil situación personal y del club.



