Alexis: 19 años de Maravilla Roja

Alexis: 19 años de Maravilla Roja

Esta semana se conmemora un hito imborrable en la historia del fútbol chileno: se cumplen 19 años del debut de Alexis Sánchez con la camiseta de La Roja adulta. Un momento que marcó el inicio de una trayectoria legendaria para el Niño Maravilla y que recordamos con emoción.

El instante de su ingreso a la cancha resuena en la memoria colectiva, tal como se narra en el registro de la época: "Alexis Sánchez, el foco, el niño maravilla, llámelo como usted quiera. Ingresa Sánchez, ahí está la modificación entonces de Sánchez". Palabras que anticipaban la brillante carrera del tocopillano, quien, según se comentaba en ese entonces, "seguirá los próximos días la huella de David".

Desde aquel primer partido, el resto es historia, ¡y qué historia la de Alexis Sánchez! Un jugador que ha dejado una huella imborrable, convirtiéndose en uno de los máximos referentes del fútbol nacional e internacional.

Esta semana se conmemora un hito imborrable en la historia del fútbol chileno: se cumplen 19 años del debut de Alexis Sánchez con la camiseta de La Roja adulta. Un momento que marcó el inicio de una trayectoria legendaria para el Niño Maravilla y que recordamos con emoción.

El instante de su ingreso a la cancha resuena en la memoria colectiva, tal como se narra en el registro de la época: "Alexis Sánchez, el foco, el niño maravilla, llámelo como usted quiera. Ingresa Sánchez, ahí está la modificación entonces de Sánchez". Palabras que anticipaban la brillante carrera del tocopillano, quien, según se comentaba en ese entonces, "seguirá los próximos días la huella de David".

Desde aquel primer partido, el resto es historia, ¡y qué historia la de Alexis Sánchez! Un jugador que ha dejado una huella imborrable, convirtiéndose en uno de los máximos referentes del fútbol nacional e internacional.

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El mejor gol de Carlos Villanueva

Fue uno de sus primeros goles, pero lo marcó para siempre.

En la lejana Copa América de 2007, la Roja se despidió con una abultada goleada en contra ante Brasil. Pero antes de eso, el equipo de Nelson Acosta vivió algunas alegrías como la agónica victoria ante Ecuador en fase de grupos.

Carlos Villanueva fue uno de esos protagonistas y, en su visita al Reino Fútbol, recordó el golazo que anotó de tiro libre a pocos minutos de flinal.

Hasta el día de hoy, el zurdo asegura que ese es el mejor gol de su carrera.

El viejo debate: ¿ver campeón a tu equipo o a tu país?

Hay una pregunta que atraviesa generaciones, discusiones de sobremesa, mesas de café y cabinas radiales: ¿Qué prefieres? ¿Ver campeón a tu selección en un Mundial o a tu equipo en la Copa Libertadores?

No hay respuesta correcta. Pero sí hay pasiones distintas.

En Reino Fútbol, Kaiser lo dijo sin titubeos: prefiere ver a la U campeón de la Libertadores que a Chile ganando el Mundial. Y esa afirmación, lejos de ser polémica, abre una reflexión más profunda sobre los afectos que construimos en el fútbol.

Para muchos, el club es lo cotidiano. Es lo que se hereda, lo que se vive semana a semana, lo que acompaña en las buenas y en las malas. El club está en la ciudad, en la familia, en la memoria de infancia. La selección, en cambio, aparece de forma más esporádica. Es la nación. Es el estallido colectivo. Pero para muchos, no tiene la misma intimidad emocional.

La Copa Libertadores es el sueño continental. El título que obsesiona. El que separa a los clubes grandes de los legendarios. Y cuando tu equipo nunca la ha ganado, como le pasa a Universidad de Chile, el deseo se vuelve aún más profundo. Casi vital.

Por otro lado, ganar un Mundial parece el pináculo absoluto del fútbol. La gloria máxima. Pero para algunos, es un logro que no toca tan de cerca como lo haría ver a su escudo levantar la copa en Sudamérica.

Este viejo debate no tiene ganadores. Solo tiene hinchas. Y en ese sentido, cada respuesta es legítima. Porque lo importante no es qué elegirías tú. Lo importante es que el fútbol nos hace imaginar esas posibilidades, y en ese ejercicio, nos recuerda por qué lo amamos tanto.